Para preparar este plato necesitaréis hacer primero la bechamel de calabacín cuya receta encontraréis pinchando aquí. Cuando vayáis a hacerla, apartad una cucharada más o menos de cebolla cruda para el relleno que vamos a preparar.
Si no queréis hacer la bechamel de calabacín podéis usar la que vosotros hacéis normalmente con sus correspondientes propoints, pero tened en cuenta que la de calabacín la podéis usar en días de no contar.
También vais a necesitar queso crema 0% MG pero como es difícil de encontrar lo podéis hacer vosotros mismos siguiendo esta receta de aquí. Tendréis que elaborarlo con antelación ya que se necesitan entre 24 y 48 horas. Otra opción sería usar queso crema light teniendo en cuenta que 90 gramos son 4 propoints.
Podéis usar las especias que queráis para sazonar los filetes antes de ponerles el relleno. Si usáis especias ya mezcladas, mirad en la composición si llevan sal para no pasarnos con ella.
De acompañamiento, lo ideal sería patata asada. Aprovechando que vamos a encender el horno, se pueden envolver unas patatas en papel aluminio para asarlas.
De acompañamiento, lo ideal sería patata asada. Aprovechando que vamos a encender el horno, se pueden envolver unas patatas en papel aluminio para asarlas.
Propoints totales: 24
Propoints por porción: 6
Porciones: 4
Alimento
1 pp en
días de no contar
Ingredientes
2 pechugas de pollo (600 g) (16 pp)
2 tomates
90
g queso crema 0% MG (1 pp)
Cebolla
Ajo en polvo
Especias al gusto (especial pollo, toque ibérico…)
Orégano
Pimienta negra
Sal
1 cucharadita de aceite (1 pp)
Bechamel de calabacín (3 pp)
30
g emmental rallado (3 pp)
Preparación
Encendemos el horno a 180ºC con calor arriba y
abajo.
Con ayuda de un pincel repartimos
el aceite por el fondo de una fuente apta para horno. Reservamos
Cortamos el tomate en
dados pequeños y los ponemos en una fuente. Salamos ligeramente. Añadimos una
cucharada de cebolla picada, ajo en polvo, una pizca de orégano y el queso
crema. Mezclamos todos los ingredientes.
Cortamos las pechugas en
filetes finos. Los colocamos encima de la mesa de trabajo. Sazonamos solo por
la cara visible con las especias que hayamos elegido. (No echamos sal porque
las mezclas de especias suelen traer ya sal.)
A continuación, untamos
cada filete con la mezcla anterior sin llegar a los bordes. Enrollamos los
filetes de uno en uno y los disponemos en la fuente reservada.
Salpimentamos. Cubrimos
con la bechamel, espolvoreamos el queso rallado por encima.
Introducimos en el horno
durante 30 minutos. Encendemos el gratinador 10 minutos más.
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